En MAPFRE sabemos lo importante que es tu tranquilidad y la de tu familia, por eso tenemos para ti la mejor opción en Camposanto que permitirá un descanso eterno. Contamos con un servicio completo y de total calidad.

Visitas: 

Camposantos Huachipa, Chincha, Pisco, Ica y Piura: Se podrán realizar las visitas a partir del sábado 22 de mayo. Grupo Familiar de hasta 3 personas por visita.

Canales de atención:

WhatsApp MAPFRE: 999919133 (opción 7)
Central SI24: 213-3333 (Lima)/ 0801-1-1133 (Provincias)/ *3001 (Celular a nivel nacional)

El Camposanto Mapfre de Ica es un cementerio ubicado en la ciudad de Ica, Perú. Es reconocido por su historia y su importancia como lugar de descanso final para muchas generaciones de iqueños. Fundado en el siglo XIX, el Camposanto Mapfre de Ica alberga una rica variedad de mausoleos, tumbas y monumentos funerarios que reflejan la diversidad cultural y la herencia histórica de la región.

Además de ser un sitio de conmemoración y reflexión, el cementerio también sirve como un espacio de interés cultural y turístico, atrayendo visitantes interesados en explorar su arquitectura colonial y su legado histórico.

Con una atmósfera serena y respetuosa, el Camposanto Mapfre de Ica continúa siendo un lugar emblemático en la ciudad, honrando la memoria de aquellos que descansan en sus terrenos.

Además de su función como lugar de reposo eterno, el Camposanto Mapfre de Ica juega un papel significativo en la vida de la comunidad local. Es un sitio donde se llevan a cabo diversas actividades conmemorativas y religiosas, especialmente durante fechas importantes como el Día de los Difuntos.

Asimismo, el cementerio es un testimonio vivo de la historia y la identidad de Ica, preservando las tradiciones y valores de generación en generación. Con su belleza arquitectónica y su atmósfera tranquila, el Camposanto Mapfre de Ica es un destino tanto para aquellos que buscan honrar a sus seres queridos como para aquellos que desean explorar la riqueza cultural y histórica de la región.

Este cementerio es mucho más que un lugar de descanso final; es un símbolo de la memoria colectiva y la permanencia de la comunidad iqueña a lo largo del tiempo.